viernes, 19 de septiembre de 2008

DECEPCION





Decepción es un cangrejo mutante.

La decepción ha olvidado su nombre y se ha resignado a ser un fantasma

La decepción quiere un par de suelas usadas para poder correr al borde del acantilado

La decepción ha venido a llamar por mí

La decepción le pregunta por mí, y ella, la mujer que abre la puerta, la mira, le tira de sus

hombros, y le dice que no me conoce.

Sabe que la decepción es infiel, que la decepción es una víbora

--No, no lo conozco.—

--¿Estás segura?—
le pregunta decepción a ella, y ella lo piensa, lo considera, y le cierra la puerta en la cara.

Llama por mí.

--¿Qué haces con la decepción?—

--La decepción no existe.—le contesto.

--Acaba de llamar por ti.—

--Decepción está muerta, lo siento.—le insisto.

--Acaba de llamar por ti.—

-Esa no es decepción.—

--Decepción está muerta.—repito.
la decepción es un concepto muerto, la decepción es el absurdo del tablón rayado, decepción dejó
de ser cuando la fe perdió el acento y se volvió un lujo.

--Te pregunto una última vez, ¿qué haces con la decepción?—

--La olvido.—le contesto, y ella se enoja

He decidido olvidar la decepción porque ella me lo ha pedido.

La decepción anda buscando a su creador, para que le de un nuevo nombre.

La decepción no es la decepción. La decepción es ahora un conjunto de tres sílabas ambulantes

que buscan un nuevo significado. La decepción me anda buscando porque…--

--Cállate.—me ordena.

--No puedo.—

--Cállate—

--No puedo—

--Cállate.—

--No puedo.—

--Cállate.—

--Lo siento—le digo
y me amarro los zapatos de velcro y corro por el medio de una carretera buscando a decepción.

La encuentro sentada bajo la sombra del refugio, que aún permanece cerrado, con su cara escondida en sus manos.

--me pregunto por que siempre busco un refugio—
me dice el cangrejo, que ahora toma la forma de un bum de ojos achinados y pies descalzos.

--me pregunto porque buscas el refugio—le repito.

--¿por qué andamos preguntándonos?—

--no sé—le contestó, así, en minúsculas.

-Te busqué.—

--lo sé.—

--vives con alguien.—me dice, celosa, celoso.

--vivo con ella—

--sí, ella.—

--lo siento, aún te llama decepción.— me disculpo.

--¿padece de aquello?—

--no padece—

--llámale como quieras entonces—

--pues, sí, sí, creo que siempre lo hará.—

--lo siento.—
-
-no te disculpes—le digo.

--entonces, ¿me debería seguir llamando decepción?—

--no sé… espero que no.—

--tú decides.—

--yo decido— redundo.

--exactamente, decides mientras sigas hablando en minúsculas, mientras permanezcas alejado de la sangría que comienza el párrafo.—

--sangría suena a violencia—

--la sangría es parte de la decepción, que es parte de la oración

--No sé como aclamarte.—
admito, por fin, utilizando mayúsculas.

--¿cómo quieres llamarte?—le preguntó

--No sé, algo bonito.
Me gusta alelí, me gusta moriviví, me gusta dama de la media noche, me gusta olvido, me gusta púrpura, felicidad, recuerdo, humanidad, redundancia… me gusta melodía, ritmo, palabra… me gusta todo menos decepción.—

La ayudo a ponerse de pies, camino con ella, le pongo mi mano en su hombro, que brilla, acerco mis labios a su oreja, redonda, y le susurró su nuevo nombre, que se rellena hasta ser brisa, que la revive.

La siento cambiar, detrás de mí, pero no me atrevo a mirarla. No miro hacia atrás hasta que toco la puerta del apartamento y espero que la otra ella, la que vive conmigo, me abra. Cuando lo hace, aún veo en sus ojos a la difunta decepción.

Prefiero permanecer en silencio hasta que ella se de cuenta que decepción es parte del inminente olvido que colma toda la santa y breve humanidad.


(Fragmento tomado desde "El nombre de decepcion" de http://sergiocarlos.blogspot.com/)









6 comentarios:

  1. Gracias por compartir este fragmento.
    Muchas veces la decepción tocó mi puerta y se anunció con nombres que mis labios han nombrado enamorados.
    Te dejo un beso.

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  2. uff un relato conmovedor... como siempre me sorprendes gratamente Gotitas. bss

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  3. La decepción vino a buscarme ayer pero me escondí bajo la cama... y en la ventana toca esperanza, creo que me fugaré con ella.

    Besos!

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  4. Sí, esa decepción ayuda mucho a olvidar... mucho mucho.
    Espero que tengas una bella semana.
    Saludos saturnianos!
    =)

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  5. Oye...

    Esta muy muy padre =) Es algo asi como mmh.. Hola soy decepcion, mejor te cambio el nombre por felicidad =) eso suena nice nice...

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  6. Es difícil luchar contra la decepción, pero hay que intentarlo. Espero que vaya todo bien al otro lado. Me alegro de leerte de nuevo. Un beso muy grande.

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